Fotografía de Ingrid L. González Díaz
A los jóvenes poetas
No, no mires lo que ves,
mira la herida del silencio del otro en
uno,
el llorido de la piedra entre tus manos,
el placer del sol abrazado con el agua,
la voz suave, pálida, naciente o ya
cansada,
del alma del tiempo y de las cosas.
Del libro
La sequedad del estanque de Genaro González Licea
No hay comentarios:
Publicar un comentario