Con
un cerrado aplauso de respeto y reconocimiento a los escritores y poetas que se
han ido de este mundo, inició, en el Centro Cultural Independiente Sarah
Tisdall, el tercer encuentro de Poesía, Minificción y Cuento Breve “Roberto López
Moreno” 2023, convocado por El Canto de la Alondra, palabra de colibrí III.
Rodeados de arte y cultura como forma
natural y cotidiana de vivir, cada escritor y poeta expresó su fuerza y calidad
hecha palabra. Las pinturas de Sarah Tisdall, su creación artística de tono
surrealista y colorido muy mexicano y suyo, envolvió la voz y narración poética,
sucedió lo mismo con las pinturas de evidente compromiso social de Arturo Reyes
Mata, y el simbólico espacio libertario que lleva el nombre del muralista José
Hernández Delgadillo.
Gracias por la invitación y el esfuerzo
enorme, entre otros, de Arturo Reyes Mata, director del Centro Cultural en cuestión,
de los organizadores Francisco Fierro Brito y Marcela Romn y, por supuesto, de las
palabras mayores de cada uno de los participantes en el merecido homenaje al poeta
y amigo Roberto López Moreno. Roberto, mi estimado Roberto, poeta feliz por estar
presente “en esta tarde inolvidable”, poeta que cantó, sin micrófono y de memoria,
ese hermoso corrido compuesto para él mismo, titulado “la muerte de Roberto
López Moreno”.
Pues bien, en este espacio de cultural leí
los siguientes versos de “la sequedad del estanque”, título del poemario de mi
autoría de próxima publicación.
GENARO GONZÁLEZ LICEA
A los poetas y escritores del 1º, 2º y 3º
Encuentro de Poesía, Cuento Corto y Minificción
“Roberto López Moreno”.
Prepárate a morir, poeta
Prepárate a morir, poeta,
solo, sin una sombra que te abrace.
Desnudo de ti, de mí,
de la gloría calcinada en el camino.
El alma es un instante de misterios y
pasiones,
luces y sombras encontradas,
comunión de voces divinas y profanas,
instantes de llamas, brisa, tierra y ceniza
adolorida.
Prepárate a morir, poeta.
Despídete de esa tu voz hecha de leña
y arde, con ella, sin temores.
Genaro González Licea
Fotografía sin datar
Mi tristeza se borra con la sombra de la luna
Mi tristeza se borra con la sombra de la
luna,
mis pasos lloran como el agua que no encuentra
su camino,
como una voz que en los ojos se deshace,
se desliza y se despide,
cansada ya, de tanto estar cansada.
Moriré, un día moriré
Moriré, un día moriré.
Nadie me buscará más que mi sombra,
la infinita sombra que habité,
esa sombra, mi sombra,
que un día también me olvidará.
En un cementerio abandonado
En un cementerio abandonado,
tu alma y la mía son como flores cristalinas
que nacen y mueren mirando su ser entristecido.
Veo sus cenizas palpitar
Veo sus cenizas palpitar
como gotas de rocío perdidas en la aurora.
El aire las lleva con su voz distante
y ese suave mirar del que sabe
que ya jamás verá la luz del día,
ni el rostro del ser amado,
ni la vieja cobija que tanto amó.
Su cuerpo es nada ya.
Sol y ceniza dejada entre mis manos,
tarde que se aleja como pájaro sin alas,
olor de brisa, manantial y sepultura.
El vacío engendra su vacío
El vacío engendra su vacío,
un instante, un latido,
un brillo en su sombra, un desvacío.
Me ahogué con mi propio sudor envejecido
Me ahogué con mi propio sudor envejecido.
Destruí mi tumba antes de haberme sepultado.
Los gusanos me buscarán sin encontrarme,
morirán viejos como yo, buscando, buscando,
buscando.
Mañana seré un viento suave jugando entre
tus manos,
un suspiro perdido sobre el agua.
Caloclica, CDMEX, 27 de mayo de 2023.
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